Llega el mes de Diciembre y con él, la importante bajada de temperatura. Como ya es de saber, el frío es uno de los mayores enemigos de la piel y como consecuencia los signos de sequedad, cansancio, rojeces y deshidratación, se hacen más visible en nuestro rostro. Para evitar dichas consecuencias, nuestra Directora Marina Rulló, nos desvela 7 sencillos y prácticos pasos, para que tu piel le haga frente al frío.
- DESCANSA MÁS: La oscuridad es la señal que tu cerebro necesita para producir más melatonina, por lo que será necesario de que demos flexibilidad al cansancio y seamos más rigurosos durante estos próximos días. Cuando duermes, tu piel se repara y regenera. Un sueño ineficiente siempre es consecuencia de tener un rostro apagado y con síntomas de fatiga. Si a esta consecuencia, le añadimos el factor frío, es muy probable que si no descansas más de lo habitual, visualices un rostro distorsionado
- LIMPIEZA ROSTRO: Mantener nuestra piel limpia diariamente es básico para que esta se mantenga bien hidratada y no sufra las bajas temperaturas. Es importante los productos con los que realizaremos esta limpieza, así pues, evitaremos productos que nos produzcan sequedad, como los jabones, podemos limitar su uso a una vez a la semana, y aprovecharemos productos como los aceites que nos aportaran más elasticidad a la piel y nos ayudaran a realizar mejor la limpieza de las células muertas.
- HIDRATACIÓN: El frío y el viento resecan mucho la piel, es por eso que se recomienda la utilización diaria de cremas con ceras alba y glicerina que mantienen la piel con más humedad y aumentan los niveles de hidratación.
- TRATAMIENTO EN CABINA: Con las bajas temperaturas, el tratamiento más recomendado es el de aportar ácido hialurónico a tu piel, por su gran aporte en agua que harán que aumenten de manera inmediata los niveles de hidratación.
- SUPLEMENTOS VITAMINÍCOS: Ayudarnos con suplementos como el colágeno, el ácido hialurónico y la vitamina C, nos ayudaran a la regeneración celular gracias a sus aportes de agua y efecto antioxidante.
- TEMPERATURA AMBIENTAL: Para un buen cuidado de la piel, es importante no someter nuestro tejido a los cambios bruscos de temperatura, más aun las pieles sensibles ya que rápidamente se ven alteradas, moderar la temperatura de la calefacción será un gran aliado en la hidratación de la piel.
- ALIMENTACIÓN: Los pescados de agua fría, como el salmón, contienen grasa natural que los hace una excelente fuente de ácidos grasos esenciales (AGE). Estos ácidos ayudan a mantener tu piel hidratada. Para mantener un buen estado anímico, se aconseja tomar caldos o cremas para mantener el cuerpo a una temperatura corporal más adaptada a esta ola de frío.